Bruselas fue un lugar con muchas ventajas académicas y culturales. Mezcla de culturas, no me sentía viviendo en Bélgica, sino en Europa. Un par de horas en tren y ya estás en otro país.
Además de los colegas en el Centrum Leo Apostel (CLEA) de la Vrije Universiteit Brussel (VUB) , interactuaba con otros estudiantes y asistía a seminarios del laboratorio de inteligencia artificial (Luc Steels) y en la Université Libre de Bruxelles (ULB) con el suyo (IRIDIA, Marco Dorigo y Hugues Bersini) y su centro de dinámica no lineal (CeNoLi, Gregoire Nicolis, Ilya Prigogine falleció poco después de que yo llegara).

Tenía la intención de continuar mi trabajo de licenciatura y maestría en ciencias cognitivas, pero pronto me di cuenta de que podría ser demasiado subjetivo y cambié de tema a sistemas complejos en general y sistemas auto-organizantes en particular. En paralelo seguí desarrollando trabajos en redes booleanas aleatorias que había iniciado en Sussex.
Hubo muchas oportunidades de ampliar horizontes en viajes académicos y turísticos. Aprendimos neerlandés, poquito japonés, palabras de turco, árabe y farsi.


Nadya entró a estudiar vrije kunsten (artes libres, pintura) en Sint-Lukas Hoogeschol. Gracias a su programa Erasmus, fuimos a vivir un semestre a Granada.
//continuará…